El Atago fue un crucero pesado japonés cuya quilla se colocó en 1927, se botó en junio de 1930 y se puso en servicio en la Armada Imperial Japonesa en marzo de 1932. La longitud del barco en el momento del lanzamiento era de 203,8 m, la anchura de 20,4 m y el desplazamiento total real, después de la modernización: 15.200 toneladas. El crucero Atago tenía una velocidad máxima de 35,5 nudos. Al estallar la Segunda Guerra Mundial, el armamento principal consistía en 10 cañones de 203 mm en cinco torretas, dos cañones cada una, y el armamento adicional incluía: ¡8 cañones de 127 mm y hasta 16 tubos lanzatorpedos de 610 mm!
Atago fue el segundo crucero de la clase Takao. Los cruceros de este tipo se construyeron respetando las limitaciones del Tratado de Desarme de Washington firmado por el gobierno de Tokio en 1922. Los barcos de este tipo se basan claramente en el diseño de los cruceros de la clase Myoko. Los cambios en cuestión: el uso de nuevos cañones de artillería principal, blindaje mejorado, expansión de la superestructura de proa y mejor diseño del armamento de torpedos. También se hizo hincapié en la alta velocidad máxima. La persecución de objetivos tan extremos condujo a la creación de barcos con potente armamento de artillería y torpedos, gran velocidad, pero con un alcance inferior al supuesto, bravura marítima media y con considerables problemas de estabilidad. Las modernizaciones posteriores de los dos primeros barcos de este tipo eliminaron parcialmente estas desventajas, pero no las eliminaron por completo. La ruta de combate del crucero Atago en la Segunda Guerra Mundial comenzó en diciembre de 1941 con apoyo para los desembarcos japoneses en Malaya y Filipinas. En junio de 1942 participó en la Batalla de Midway, pero sobrevivió sin mayores daños. Luego operó en las Islas Salomón y participó en la Batalla de la Isla Santa Cruz (octubre de 1942) y las batallas en la zona de Guadalcanal. En noviembre de 1943 resultó dañado como consecuencia de un ataque aéreo estadounidense sobre la base de Truk en la que se encontraba en ese momento. El daño resultó ser tan grave que el barco tuvo que regresar a Japón para su reparación. No entró en la línea Atago hasta principios de 1944. En junio de 1944 participó en la Batalla del Mar de Filipinas, y en octubre del mismo año, en Leyte Bay. Allí fue hundido por el submarino estadounidense USS Darter el 23 de octubre de 1944.